La Fiesta de la Belenita en Huaraz: Celebrando la Tradición y la Devoción
Cada 24 de enero, la ciudad de Huaraz se viste de fiesta para celebrar la festividad de la Virgen de Belén, cariñosamente conocida como «La Belenita», patrona del barrio del mismo nombre. Esta festividad marca el inicio del calendario festivo anual en Huaraz y es una ocasión especial que combina la religión, la cultura y la tradición, atrayendo a lugareños y visitantes por igual para participar en una serie de rituales y festividades que rinden homenaje a esta venerada figura.
Una Tradición de Devoción y Celebración
La fiesta de la Belenita es una celebración profundamente arraigada en la cultura de Huaraz, donde la devoción a la Virgen se entrelaza con las tradiciones locales y la vida cotidiana de la comunidad. Según la tradición, la Virgen de Belén permitía que su niño saliera a jugar en la plazuela con los niños del lugar durante su fiesta, y luego lo recogía con las sandalias llenas de barro, que ella limpiaba con esmero antes de volverlo a su altar. Esta historia ilustra el cariño y la cercanía que los fieles sienten hacia su patrona.
Preparativos y Celebraciones
El mes de enero es un momento de gran actividad en Huaraz, ya que se prepara para la fiesta patronal en honor a la Virgen Belenita. Durante este tiempo, se llevan a cabo una serie de actividades religiosas y culturales, que incluyen danzas folclóricas, festivales de comidas típicas y encuentros de comunidades campesinas con sus santos patrones. A pesar del clima frío de la región, la cálida devoción del pueblo sobrepasa las bajas temperaturas, creando un ambiente festivo y acogedor.
Ofrendas y Devoción
Los devotos tienen la tradición de ofrendar presentes a la Virgen, como joyas, arreglos del anda, flores y mantos, como muestra de su devoción y gratitud. Durante esta época, la parroquia de Belén organiza una serie de actividades propias de estas fechas, que incluyen misas especiales, procesiones y actividades comunitarias.
Historia y Rivalidades
La imagen de Nuestra Señora de Belén, conocida como la Virgen Belenita, llegó a Huaraz desde España a principios del siglo XVIII. Inicialmente, la imagen estaba sola, pero más tarde se le añadió al niño Jesús para formar con San José la Sagrada Familia. La festividad en honor a la patrona del barrio de Belén se celebra con gran fervor cada 24 de enero, con actividades populares en la plazuela donde se ofrecen viandas tradicionales y se realiza la famosa verbena de Belenita, con la quema de castillos y expresiones artísticas.
En el siglo XIX se establecieron los cuatro barrios tradicionales de Huaraz, entre ellos Belén. Desde entonces, existe una rivalidad conocida entre soledanos y belenistas, con bromas sobre el carácter presumido de los habitantes de Belén, apodados «alalaq Belén» por el frío viento que llegaba por las tardes del río Santa. Esta rivalidad, lejos de ser divisiva, añade un toque de humor y camaradería a la celebración de la Belenita, recordando a los lugareños la rica historia y tradiciones de su querida ciudad.